De manera similar a un pozo de fuego, debes curar tu wok antes de usarlo por primera vez después de que desarrolle una capa que le da una superficie antiadherente natural y protege las ruedas.
Lo sentimos, ¡desacondimentar el wok o la estufa es un juego de niños!
- Lave el interior de su wok/estufa con agua caliente y un poco de detergente. Utilice una gasa suave (por ejemplo, un papel que se pueda limpiar con un paño o una esponja). Es el único momento en el que tu wok entra en contacto con el detergente, al menos hasta que se enrojece.
- Enjuague el detergente con agua caliente y seque cuidadosamente su wok/estufa.
- Ahora coloca tu wok/estufa sobre la estufa y enciende el fuego.
Según este proceso el color de tu wok cambiará.
CONSEJO: Gire e incline el wok hacia la cocina para que el color cambie aún más en el costado. - Una vez que el wok o la estufa estén calentados de manera uniforme, apague el fuego.
- Ahora agregue aproximadamente 1 molinillo de suero de leche/aceite a su wok/estufa y limpie toda la superficie dentro del wok/estufa con una toalla de papel.
¡Ten cuidado de no quemarte!
- Calienta tu wok/estufa a fuego medio durante unos 10 minutos. Esto produce humo, así que asegúrese de que las ventanas estén abiertas y el ventilador de extracción encendido.
- Retire el wok/estufa del fuego y límpielo con un paño nuevo. Puede suceder que ahora queden residuos negros en esta gasa.
- Repita los pasos 5 a 8 hasta que no queden más residuos negros en toda la estufa y el interior de su wok sea una mota dorada o negra.
Su wok/estufa ya está listo para usarse.
